El Centro Temático del Vino Villa-Lucía, en Laguardia, cumple un cuarto de siglo consolidado como un espacio pionero y emblemático en la difusión de la cultura del vino. Como explica desde la empresa, este enclave celebra 25 años «de aprendizaje, emoción y experiencias sensoriales que han convertido su visita en un viaje inolvidable para grandes y pequeños».
En este tiempo, miles de visitantes han conocido el mundo del vino de la mano de Vinfo, el duende del vino, símbolo del centro y guía de un recorrido pensado para todos los públicos. “Tocar, escuchar, oler, mirar y saborear… y hacerlo sin barreras”, recuerdan desde Villa-Lucía, el primer museo del vino 100 % inclusivo en lengua castellana del mundo.
El proyecto nació de la visión y el esfuerzo de Luchy Santamaría y Manolo Lavín, matrimonio que supo trasladar su pasión por la cocina vasco-riojana y el vino a un espacio donde la gastronomía, la tradición y la cultura se dan la mano. Hoy, su legado continúa con la gestión de Juanma y Rubén Lavín, quienes han logrado que Villa-Lucía sea mucho más que un restaurante: un auténtico espacio gastronómico y cultural abierto a todos.
Además de su propuesta culinaria Km 0, Villa-Lucía ha diversificado su actividad con eventos empresariales, bodas entre viñedos y el innovador programa ComeCultura, creado en 2016. Esta iniciativa fusiona enogastronomía y arte con más de 125 eventos que han reunido a 20.000 personas en espectáculos de humor, conciertos o fiestas temáticas.
Su centro de interpretación sigue siendo una joya del turismo enológico. Con audiovisuales, catas virtuales, paneles interactivos y recursos inclusivos, permite conocer la historia y los rituales del vino de forma didáctica. Entre sus grandes atractivos destaca En tierra de sueños, un cortometraje en 4D galardonado internacionalmente en festivales de Hollywood, Viena o Nueva York por su innovación y su accesibilidad universal.
Como avanzan sus responsables, «Villa-Lucía mira al futuro con la misma ilusión con la que abrió sus puertas hace 25 años. Un espacio donde la tradición y la modernidad conviven, y donde cada visita es una celebración del vino, la cultura y la emoción compartida».
















