Lo prometido es deuda.
Hace unas semanas os anunciábamos la elaboración de un “decálogo de buenas prácticas senderistas para familias” y nada mejor que este #diadelmedioambiente para sacarlo a la luz.
No hubiera sido posible sin dos personas: Miguel Lara, educador ambiental de Madreselva y Ana Alegría, vecina de Matute, que en su día nos escribió esta carta alertando de lo que estaba ocurriendo en este bello paraje.
El resultado, como veis, este decálogo resumido en 10 puntos que esperamos cumplir a rajatabla. Lo vais a ver muchas veces porque, a partir de ahora, lo incluiremos en todos los artículos relacionados con escapadas y excursiones a la naturaleza.
En tus escapadas y excursiones a la naturaleza debes comportarte como lo haría cualquier persona invitada a una casa; en este caso, al hogar de otros seres vivos. Deberás respetar a quien te ha invitado y mostrar tu mejor cara. Conoce sus hábitos y aprende de la naturaleza.
1) No arranques flores.
Las mariposas las necesitan y quienes vengan detrás se pondrán tristes al no encontrarlas.
2) No te salgas del camino.
Allí donde pises hay vida. Si pisoteamos la tierra las raíces de las plantas no pueden crecer ni reproducirse (observa lo que pasa en los parques urbanos).
3) Disfruta sin chillar.
Si queremos ver pájaros no podemos asustarlos o se irán con sus cantos y sus nidos a otro lado.
4) No te lleves nada de recuerdo.
Todo lo que ves a tu alrededor: palos, ramitas o piedras. tiene su función. Haz una fotografía o un dibujo del lugar para mostrárselo a tus amistades.
5) Cuida los ríos y sus orillas.
Si te quieres refrescar, hazlo con cuidado. No remuevas las piedras del lecho conservan mucha vida e intenta no dejar crema solar en el agua.
6) Las rocas tienen vida.
Sus tiempos de evolución son muy lentos, pero ellas los necesitan. Obsérvalas también; mira hacia arriba y verás figuras increíbles. En esas mismas rocas buscan refugio y hogar muchos seres. Descubre esos hogares y esas vidas, a veces muy pequeñas como los musgos y otras enormes como las aves.
7)Los bichos “feos” son estupendos.
No los pises acércate y míralos con cuidado, son sorprendentes. O si no déjalos, ellos seguirán ayudando a mantener nuestros ecosistemas.
8) Déjalo como lo has encontrado (o mejor)
Cuando te vayas, todo ha de quedar como antes. No dejes nada, ni siquiera lo que crees que es biodegradable (las cacas de tu mascota, tampoco).
9) Mascotas vigiladas.
Pueden ser peligrosas para otros seres vivos e incomodar a otros visitantes. Hay que controlarlas en todo momento.
10) Disfruta del paseo.
Tienes la obligación de disfrutar, de llenarte de olores, meterte pájaros en la cabeza, paisajes en tu imaginario y recuerdos para tu vida, vida que crece a nuestro alrededor, vida que ayudarás a que perdure. A la vuelta te sentirás mucho mejor y permitirás que otras personas también lo hagan.
