En este artículo, Al Halda, asociación de apoyo a la lactancia materna en La Rioja, habla sobre el consumo de alcohol durante la lactancia. ¿Es compatible? ¿cuánta cantidad está «permitida»? ¿hay que sacarse leche si se piensa consumir alcohol? Lo vemos.
Por: Diana Arconada (asesora de lactancia de Al Halda y periodista).
Dice Carlos González, en su Manual Práctico de Lactancia Materna, que, si bien durante el embarazo habría que insistir particularmente para conseguir un consumo cero de alcohol, durante la lactancia un consumo moderado es aceptable, y el insistir demasiado podría llevar a algunas madres a destetar. La leche materna con un poco de alcohol sigue siendo mejor que la leche artificial.
[quote color=»#000000″ arrow=»yes» align=»center»]»La leche materna con un poco de alcohol sigue siendo mejor que la leche artificial» (Carlos González, pediatra).[/quote]
Pero, ¿qué es un consumo moderado? ¿Qué es un poco de alcohol? ¿Da igual con un bebé de unos días que de unos meses, o un niño de un año?
Por supuesto, no estamos hablando de un consumo crónico de alcohol, ya que esto deriva en otros problemas (a los que también apunta Carlos González en este libro), dado que una madre ebria no puede atender debidamente a su bebé y, por tanto, las complicaciones se multiplican.
Estamos hablando del momento en el que nos invitan a una boda y nos apetece una copa de vino en la comida; de tomarnos una caña mientras hablamos con las amigas, de celebrar San Valentín con un vino… ¿Cuánto puedo beber y cuánto tengo que esperar para dar pecho? O, incluso, ¿tengo que sacarme la leche cuando vuelva con mi bebé?
Si buscamos en e-lactancia, el alcohol aparece con “riesgo alto probable”. En cuanto al tiempo que debemos esperar después de beber explica que “el tiempo necesario a esperar a amamantar para que el alcohol ingerido de forma ocasional haya desaparecido de leche y sangre (Ho 2001) depende del peso de la madre (a menos peso, más tiempo) y de la cantidad de alcohol consumido (a más alcohol, más tiempo)”.
[quote color=»#000000″ arrow=»yes» align=»center»]»A menor peso de la madre y más cantidad de alcohol haya ingerido, más tiempo deberá esperar» (e-lactancia).[/quote]
A menor peso de la madre y más cantidad de alcohol haya ingerido, más tiempo deberá esperar para amamantar (e-lactancia). Como tiempos orientativos para una mujer de unos 60 kilogramos de peso indica a modo de ejemplo:
- Un vaso de vino: esperar 2,5 horas.
- Dos tercios de cerveza, cinco horas.
- Tres copas de licor: esperar 7,5 horas.
El estudio que usa e-lactancia es de Koren y, a este respecto, Carlos González apunta que “la difusión de este algoritmo ha hecho mucho daño, porque lo que no ha demostrado Koren, ni nadie, es que sea preciso esperar a que la concentración sea cero”.
¿Qué dice la Asociación Española de Pediatría?
La AEP dice que «es muy importante no beber alcohol al menos durante los primeros 3 meses del bebé. Después de los primeros meses cantidades pequeñas y esporádicas son tolerables (una caña de cerveza o un vasito de vino una o dos veces a la semana) procurando alejarlas de las tomas. No se deben tomar bebidas de alta graduación, como ginebra, licores o whisky. El mito popular de que un vaso de cerveza al día aumenta la producción de leche no tiene ninguna evidencia científica que lo apoye”.
[quote color=»#000000″ arrow=»yes» align=»center»]»El mito popular de que un vaso de cerveza al día aumenta la producción de leche no tiene ninguna evidencia científica que lo apoye» (AEP).[/quote]
Con todos estos datos podríamos concluir que no es planteable destetar por tomar una copa de vino esporádica; que, a partir de los tres meses, se puede tomar algo, pero con mesura.
Cuánto se puede tomar dependerá de ti porque no a todas nos afecta igual el alcohol, una buena medida sería parar ante de que te “suba”.
¿Cuánto esperar para volver a darle? Una vez más, la medida es que tú estés despejada. Pero se puede tener en cuenta la estimación que hacía el pediatra Carlos González en su libro Un Regalo para toda la Vida: La mayor cantidad (de alcohol) pasa entre los 30 y 60 minutos después de haber bebido.
[quote color=»#000000″ arrow=»yes» align=»center»]»La mayor cantidad (de alcohol) pasa entre los 30 y 60 minutos después de haber bebido» (Carlos González, pediatra).[/quote]
Tampoco es igual con una lactancia exclusiva que un niño que ya come de todo. Y si te has ido de fiesta y te has pasado, deja transcurrir suficientes horas. No hace falta que te saques leche después, porque ésta se recicla. Mientras, puedes ser precavida y sacarte, como si fueras a trabajar.
Un buen resumen sería el que hace La Liga de la Leche en El Arte Femenino de Amamantar: “Los efectos del alcohol sobre el bebé a través de la lactancia materna están directamente relacionados con la cantidad que ingiere la madre. Cuando la madre bebe de vez en cuando o limita su consumo a una bebida al día o menos, la cantidad de alcohol que su bebé recibe no se ha demostrado que sea dañino. Si disfrutas de un vaso de vino por la noche, o una cerveza fría en un caluroso día de verano, no hay razón para privarse de ello solo porque se está amamantando”.
