Una de las actividades más completas y satisfactorias de las que puede disfrutar cualquier ser humano es viajar por placer. Descubrir impresionantes paisajes, monumentos maravillosos y sumergirse en nuevas experiencias es algo que nos ayuda a crecer no solo culturalmente, sino también emocionalmente.
Sin embargo, disfrutar con los niños de los viajes no siempre es tarea fácil. Para evitar aburrimientos, lo mejor es documentarse antes, en portales como El Viajista, y así trazar un plan para disfrutar todos juntos. Si estás pensando ir a Salamanca con los más peques, no te pierdas estas actividades que, seguro, os van a encantar.
5 planes para disfrutar de Salamanca con niños
1. Pasear por su centro histórico
Una de las ciudades más ricas en historia y monumentos que nos harán viajar a siglos atrás es Salamanca. Pasear por sus calles es como hacerlo a través de una novela de aventuras. Entre las visitas indispensables encontramos, la Plaza Mayor, la fachada de la Universidad, con sus innumerables leyendas y misterios, la Casa de las Conchas y, sobre todo, la Catedral, sin olvidar el romántico huerto de Calixto y Melibea.
2. Disfrutar de sus magníficos parques
Es otro de los grandes atractivos que nos ofrece Salamanca, mucho más si viajamos con niños. Después de un buen tour por el centro, nada mejor que jugar en sus parques. De entre todos destacamos:
Campo de San Francisco. Es el más céntrico de todos y el más antiguo. Cuenta con una divertida zona de columpios, además de una biblioteca pública.
Parque Botánico de Huerta Otea. Está junto al río Tormes y en él vas a encontrar un gran número de plantas y árboles autóctonos de la zona.
Parque de los Jesuitas. Además de zonas con juegos, también encontramos pistas de fútbol y baloncesto. Es el mejor para moverse en bici.
3. Visitar los museos salmantinos
Los museos siempre son una manera excelente de abrir la curiosidad y la imaginación en las mentes infantiles, siempre que sepamos elegir de forma adecuada para que no caigan en el aburrimiento. Entre los museos que nos ofrece Salamanca podemos elegir:
Museo de Historia de la Automoción. En él vamos a encontrar vehículos de distintas épocas que, seguro, van a encantar a los niños.
Monumenta Salmanticae. Está situado en la iglesia de San Millán y ofrece una curiosa colección de recreaciones virtuales sobre distintos edificios de la ciudad. Lo más divertido es que ofrece un singular juego de escape room para toda la familia.
Museo de Bellas Artes. Además de piezas únicas de arte históricas como retablos y cuadros, también ofrece una exposición arqueológica que, seguro, encantará a los niños.
4. Tren turístico de Salamanca
Es una de las formas más divertidas y amenas de conocer Salamanca de forma cómoda. Se trata de un trenecito turístico que recorre la parte histórica de la ciudad. Durante el trayecto se podrán ver los edificios más emblemáticos mientras se conocen sus detalles a través de una audioguía.
5. Conocer las murallas y su centro de interpretación
Uno de los grandes tesoros que esconde Salamanca son sus murallas. Para conocerlas a fondo, lo ideal es visitar su centro de interpretación. En él se encuentran carteles informativos y audiovisuales para conocer estas joyas pertenecientes a la época prerromana.
Salamanca es mucho más que una ciudad plagada de historia y actividades interesantes en torno al mundo de la cultura. También es un destino ideal para disfrutar con los más pequeños, si sabemos elegir bien aquellos lugares que nos gustará visitar todos juntos. ¿Te animas a preparar tu maleta ya mismo?
