La receta que hoy os traemos nos encanta. Nos recuerda a esas meriendas de cuando éramos niños. Con chocolate o con jamón, para desayunar o merendar, estos panecillos de leche combinan con cualquier cosa y son muy sencillos de preparar. ¡Abajo la bollería industrial, arriba el pan de leche!
Ingredientes:
120 ml de agua templada
120 ml de leche templada
1 huevo
30 ml de aceite de oliva
2 cucharadas soperas de azúcar
1 cucharadita de sal
330 g de harina todo uso
15 g de mantequilla para pincelar
Vamos a comenzar mezclando en un bol la levadura con el agua templada hasta que se disuelva. En otro bol mezclamos la leche, el huevo, el aceite, el azúcar y la sal y le añadimos la mezcla anterior de levadura con agua.
Añadimos la harina y amasamos durante diez minutos hasta formar una bola de masa elástica y suave. No añadas mucha harina e la encimera para que os quede una masa con un punto húmeda. Ahora toca dejar que la masa repose durante una hora. Para ello, la devolvemos al bol y la cubrimos con film transparente.
Hecho esto, la volvemos a amasar un poco para desgasificarla y la cortamos en ocho porciones, dándoles forma de panecillos. Para ello, dejamos bien tirante la superficie y arremetemos la masa hacia la base.
Colocamos los panecillos sobre una bandeja de horno cubierta con papel de horno y esperamos otros cuarenta minutos a que leven de nuevo. Mientras, precalentamos el horno a 190º con calor arriba y abajo. Derretimos la mantequilla y pintamos la superficie de nuestros panecillos con ayuda de una brocha. Horneamos unos 18 minutos y… ¡A merendar!