Una de las preguntas más frecuentes que reciben los dentistas en sus consultas es la referida a las ortodoncias. La malposición de los dientes preocupa y mucho a los padres.
Por eso, en este artículo el doctor Eduardo Bujanda, enumera las señales de alarma más frecuentes que deben observar los padres en la boca de sus hijos.
Por Dr. Eduardo Bujanda
Clínica Dental Bujanda
Entre los 4 y los 7 años, es un buen momento para detectar problemas de posición de los dientes o de los maxilares. Además, es la etapa ideal para corregir los hábitos que a veces producen esas malposiciones.
Señales de alarma:
ο Cuanto más juntitos tengan los dientes de leche, mayor problema para que quepan los siguientes.
ο Si nuestro niño ha abusado de chupete o se chupa el dedo.
ο Si tiene los dientes superiores muy para adelante (dientes de conejito), o la mandíbula muy prominente.
ο Si mastica raro: hace muecas extrañas a la hora de masticar. Suelen ser niños que no mastican bien con las muelas, sino que se ayudan de la lengua o de los labios para aplastar los alimentos.
ο Niños con vegetaciones o dificultades para respirar. Suelen mal posicionar la lengua y eso produce alteraciones óseas.
ο Si al mandar cerrar los dientes a los niños, los de arriba no se juntan con los de abajo, sino que queda un espacio abierto, donde se puede introducir la lengua.
ο Si pronuncian mal, aparte de llevarle al logopeda, deberá visitar al ortodoncista.
ο Si los padres han tenido problemas ortodóncicos.
Ortopedia y ortodoncia
Entre los 6 y 9 años, los niños experimentan el crecimiento facial y óseo. Por eso, sería el momento recomendado para hacer ortopedia, es decir, tratamiento de los huesos maxilares. Se aprovecha ese crecimiento para colocar los maxilares en la posición correcta, de manera que la fase de ortodoncia (colocar bien los dientes), se elabore con unas buenas bases.
A partir de los 9 años en adelante la ortopedia es más laboriosa, porque los huesos ya han crecido, y en muchos casos solo se puede hacer ortodoncia. Los resultados a veces son satisfactorios, pero lo ideal es que los maxilares estén bien colocados y hayan crecido en armonía.
En cuanto a tratamientos de ortopedia, nos referimos a los niños que bien tienen el maxilar superior demasiado hacia delante, y la mandíbula más corta (clase II), o bien la mandíbula más grande que el maxilar (clase III). Suelen ser casos muy comunes, más de lo que pueden pensar, y que cogidos a tiempo, tienen mejor solución.
Es un tema mucho más extenso a tratar. Estamos a vuestra disposición si quieren hacer alguna consulta.
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Eduardo Bujanda, dentista riojano con amplia experiencia en odontología infantil, colabora con El Balcón de Mateo para hablar de higiene dental, de prevención, de cómo solucionar o tratar las patologías más frecuentes en los niños, como las caries y los traumatismos dentales.
