El Parque Gallarza se convertirá nuevamente en escenario teatral. En esta ocasión para acoger a Maña, una innovadora propuesta de cía Manolo Alcántara, que nos trae este espectáculo-instalación que gira alrededor del ingenio.
Maña muestra el proceso de construcción de un arco gigante de cajas muy pesadas utilizando como premisa la economía del esfuerzo y del movimiento, sirviéndose de una tecnología ancestral, pero llena de vigencia: la palanca, la polea, la rueda…
Maña es un espectáculo-instalación sin texto, trabaja mucho con el silencio, puesto que se enfoca de una manera introspectiva, buscando la intimidad y la reflexión con los objetos y sobre todo con el peso de los objetos. “A medio camino entre instalación y espectáculo. A medio camino entre artista y artesano. A medio camino entre la intuición y el conocimiento. A medio camino de mi carrera profesional. A medio camino de mi vida. En el camino, donde quiero estar”, explica su creador, Manolo Alcántara.
Premio al Espectáculo más innovador del TAC Valladolid 2022. Premio Susana Herreras del Festival ARCA – Aguilar de Campoó 2022 al Mejor Espectáculo «por ser un espectáculo sorprendente, innovador e hipnótico dentro de un género minoritario dentro de las artes de calle como son las instalaciones», según el jurado.
Podremos verlo el miércoles 11 de octubre, a las 19.30 horas, en el Parque Gallarza. Duración: 55 minutos.
Recomendado a partir de 9 años. La mayor parte del espectáculo se realiza en silencio.
Sobre Cía Manolo Alcántara
Soy autodidacta, me considero más artesano que artista. Creo los espectáculos totalmente des de la intituición, el yo y la curiosidad (lo que me lleva a pensar, a veces, que no sé nada sobre el circo). Acepto el riesgo del circo y lo transformo para compartirlo con el público. Entiendo, vivo y creo el circo desde la evolución. Un recorrido personal que pasa por diferentes etapas, todas importantes. De hecho, no entiendo el momento actual sin ninguna de les etapas anteriores. Este recorrido se inicia con un interés puramente demostrativo para llegar al día de hoy, en que me gusta esconder la técnica para ponerla al servicio del espectáculo. En este proceso he llegado a tener unas constantes, como un ADN que perdura montaje tras montaje (aflora en cada montaje): la creación paciente y sin prisa, apostar por la sugerencia antes que por la explicación gráfica de las historias, el cuidado en el aspecto visual utilizando estructuras innovadoras.
