Ya tenemos el regalo perfecto para el día del padre: una corbata. Pero no penséis que es una corbata cualquiera. Es de chocolate. Es una receta sencilla y a los peques les encantará participar mezclando ingredientes o decorando, porque además tienen la ilusión añadida de que es para su papá.
Para la masa:
- 6 huevos
- 100 gr. de azúcar
- 100 gr. de harina para bizcochos (harina +levadura)
- Una pizca de sal
Para el relleno:
- 4 cucharadas sooperas de azúcar
- 6 de agua
- 2 c/s de coñac
- Mermelada de naranja, o la que más os guste
Para la cobertura:
- 100 gr. de chocolate fondant
- 25-30 gr. de mantequilla
Para la decoración:
- ¼ Kg. de mantequilla en pomada (temperatura ambiente)
- ¼ l. de almíbar. (50 cc. de agua + 100 gr. de azúcar)
- Colorantes alimentarios
Vamos a hacer la masa, que es la misma que se utiliza para hacer el brazo de gitano: con la ayuda de una batidora los huevos con el azúcar y la pizca de sal durante unos 10 minutos, ha de quedar una mezcla blanquecina. Añadir la harina de bizcochos tamizada y mezclar suavemente hasta que se integren bien los ingredientes. En una bandeja de horno forrada con papel de cocina y a la que le hemos untado un poco de aceite, extendemos bien la masa. Horneamos a 180º durante unos 10 minutos o hasta que esté ligeramente dorada y cocida.
Sacar del horno y volcarla con cuidado sobre un paño de tela, quitar el papel de hornear (que nos habrá quedado arriba). Una vez enfriada la masa, nos ayudamos de una plantilla de papel para cortar dos trozos con forma de corbata y los guardamos mientras preparamos el relleno y la cobertura.
Vamos a hacer el relleno: en un cazo ponemos, a fuego medio, el agua con el azúcar durante unos 15 minutos sin dejar de remover para que no se caramelice. ¡Ojo con el fuego no se os vaya a quemar! Después añadimos el coñac (que, obviamente podemos eliminar si lo van a probar los niños).
Untamos una de las corbatas que hemos cortado con el almíbar y la mermelada. Mojamos la otra corbata y las superponemos.
Para la cobertura, mezclamos al mantequilla y el chocolate. Podemos hacerlo en una cazuela al baño María o en el microondas. Después cubrimos la corbata y, cuando casi se haya solidificado el chocolate, con un trozo de tela de trama gruesa, lo marcamos para que parezca que es de tela de verdad. Buen truco, ¿no?
Llega lo más divertido: decorar. Podéis hacerlo como queráis: con nata montada, fideos de chocolate… aquí os dejamos una idea. Hacemos el almíbar y dejamos enfriar. Batir con las varillas la mantequilla sola durante unos 8-10 minutos y añadir poco a poco el almíbar e ir trabajando la mezcla. Separar en tantas partes como colores queramos hacer, poner un poco de colorante y mezclar bien. Reservar en la nevera hasta que sea moldeable. Ya podemos decorar la corbata con una manga pastelera y hacer el diseño que más nos guste.
Fuente: http://es.paperblog.com/pastel-corbata-para-el-dia-del-padre-985109/