En verano, los niños se encuentran muchas más horas activos, jugando en las piscinas, parques y playas. Por lo tanto, también es una época muy frecuente de traumas en los dientes y la boca.
Brevemente, ofrecemos una serie de consejos que deben ser leídos atentamente, ya que en el momento del golpe, ante los nervios de la situación, debemos recordar lo que hay que hacer para intentar salvar su diente o minimizar las consecuencias.
Por Dr. Eduardo Bujanda
Clínica Dental Bujanda
10 consejos ante un golpe/caída en los dientes
1º Mantenga la calma. Son situaciones de tensión por el llanto del niño y las consecuencias del trauma: chichón, sangrado, heridas… No debemos trasmitir más miedo al niño.
2º Si el golpe ha afectado a la boca, lo normal es que tenga una herida en los labios y un trauma en los dientes. Antes de que se inflame el labio, debemos ver los dientes.
3ª Si falta algún trozo (golpes menos intensos): lo ideal es buscarlo, lavarlo con agua y llevarlo al dentista. Servirá para intentar pegarlo y en una cita posterior reconstruir el diente estéticamente.
4º Si se ha movido el diente (se puede mover para cualquier lado), significa que el golpe ha sido bastante intenso. Debe acudir al dentista rápidamente para que recoloque el diente (bajo anestesia), y los ferulice o una entre ellos. Esta ferulización debe mantenerse unas semanas.
5º Si se ha salido el diente completamente (avulsión), lo lavaremos con agua corriente o suero ¡sin frotarlo con nada! En menos de media hora, el diente tiene que ser recolocado por el dentista o el familiar en el hueco de donde se ha salido. De camino al dentista, debe guardar el diente en suero, leche o en la propia saliva del niño (o del familiar).
Nota: esto servirá para mantener el ligamento periodontal que envuelve el diente y que hará que, si lo insertamos rápidamente, pueda el diente permanecer en un futuro en boca. Si pasa más de media hora, el éxito de la reimplantación es dudoso.
6º Si no se puede ir al dentista en ese momento, deberá acudir al centro de salud cuanto antes.
7º Los traumas en los dientes de leche son menos importantes. Las fracturas son más pequeñas y si se pierde el diente, no se deben recolocar. El diente siguiente puede tardar un poco en erupcionar.
8º Si se oscurecen los dientes, la pulpa o “nervio” está afectado. En este caso, sí que puede afectar al diente siguiente o definitivo.
9º En cualquier caso, debe acudir lo antes posible a su dentista, porque todos debemos conocer los protocolos para el tratamiento de los traumas. Son situaciones de urgencia y hay que atenderlas con prioridad.
10º Aunque no haya habido un golpe ni ningún problema previo, alrededor de los 3 años debemos llevar al niño al dentista para su primera revisión.
Esperemos que pasen un feliz verano, sin traumas.
Eduardo Bujanda, dentista riojano con amplia experiencia en odontología infantil, colabora con El Balcón de Mateo para hablar de higiene dental, de prevención, de cómo solucionar o tratar las patologías más frecuentes en los niños, como las caries y los traumatismos dentales.
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